sábado, 12 de julio de 2014

EL BESO











EL BESO
Hermoso beso el de anoche, que me hizo dormir meciéndome con la dulzura de una madre.
El beso delicado, que me da descanso con la suavidad de una anciana.
El beso anhelado de un hermano, un cuerpo a cuerpo, sin corazas intermedias, conociendo en parte a la otra parte del beso.
El beso deseado de un amante, los labios entreabiertos, sintiendo la aceleración del pulso y las mariposas revolotear en la entrepierna, preludio de lo que va a acontecer.
El beso sincero de un amigo, fuerte y rápido, como si estuviera dándome palmaditas a la espalda.
El beso cómplice de una amiga, que clava su mirada sobre mí, intentando vislumbrar mi estado, para abrazarme durante mas rato si intuye que estoy por los suelos…otra vez.
El beso tímido de un desconocido, que apenas se atreve a rozarme y yo quiero que sea más lento, para ver si lo retengo durante más segundos.
El beso tierno de un padre, al cual la mirada lo delata y en ella se puede leer claramente, te quiero tanto….pequeña.
El beso efímero, que sin darme cuenta, como el humo desapareció rápido.
El beso del pasado, con el que añoro aquella situación hermosa, la cual con el paso del tiempo la he mitificado.
El beso de la desidia, ese beso demandado y a regañadientes ofrecido solo por compromiso.
El beso de la muerte, ese que a sabiendas que es lo que toca, espero que tarde en posarse en mis labios.
El beso del despertar, ese que con suavidad nos empuja a salir del camastro cálido, e ir hacia adelante, sin mirar atrás y salir de nuestra zona de confort, para enfrentarnos a un nuevo día o una nueva vida.

DESAM. FERRANDEZ

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