CAMPANILLA ABANDONA LAS ALAS
Es el momento en que campanilla se despoje de sus alas, para
no estar en la dualidad, vuelo o no, subo o no, me atrevo o no, dudas……….Ahora
que ya no tiene que elegir, ni que planear, si no dejar que todo suceda, es
absurdo mantener unas alas que no le otorgan más libertad.
Cuando quiere y sin pensarlo ya está volando y creo que ni
siquiera mueve las alas, simplemente ya está en el espacio flotando.
Hubo un tiempo en que las alas fueron precisas, porque
además, de que si que las movÃa, tenÃa un simbologÃa implÃcita en su forma de
pensar, pero ahora ya no significan libertad, porque ya no hay jaula que sea
capaz de privarle de su libertad, ganada con trabajo y tesón, despojándose de
capas que por el miedo, ella misma se habÃa puesto.
Aun es consciente de que está viviendo en una sociedad, que
tiene un trabajo, que está en la tierra, sabe que no se puede abandonar
totalmente, pero cada vez está más cerca de eso, de hacer, lo que de verdad le
sale de su varita en cada instante, cada vez mas cerca del fluir con su
creatividad, que cabalga desbocada, pidiendo tiempo para poder expresarse.
No puede parar su mente y tampoco quiere, la mente le
permite crear, lo que sà que hace es crear sin juzgar.
Ahora en vez de sus alas, mueve su energÃa creativa, que no
imaginativa, ya que esta siempre la tuvo.
Esta más atenta a lo que su mente piensa y cuando se mete en
el bucle del sin sentido sale, escapa y se introduce en el de la creatividad,
para quedarse en el, todo el tiempo del que disponga y hasta algo más.
Está aprendiendo mientras juega, al igual que los niños, que
para desarrollarse utilizan el juego o los cachorros, que para ganar fuerza y
destreza han de jugar a pelearse con otros cachorros, pues ella, está
aprendiendo a abandonarse al juego de la vida, jugando en solitario o en
compañÃa dependiendo del dÃa, emocionándose por el milagro de la vida, algo tan
maravilloso, pero que esta tan acostumbrada a verlo que a veces le pasa
desapercibido.
Campanilla se hace mayor, le ha crecido la familia y con
ella el apoyo y el acompañamiento que necesita, por eso, abandona las alas
porque ahora ya no las necesita, las suelta con amor, sin apego, con la vista
hacia adelante, mirando todo el camino que le falta por recorrer y viendo ese
camino lleno de duendes y hadas, preparados para vivirlo junto a ella,
esperando con paciencia a que ella pase por allÃ, para compartir tiempo y
vivencias que le ayudaran a madurar su espÃritu.
Gracias a todos los seres que me he cruzado en mi camino y a
todos con los que me cruzare.
DESAM. FERRANDEZ
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